Fragmento del editorial de EL MUNDO de hoy:
"La detención el pasado viernes de los tres etarras más buscados por las Fuerzas de Seguridad, miembros del comando que destruyó la T-4 y mató a dos ciudadanos ecuatorianos, es una excelente noticia para todos, por lo que es de justicia felicitar al Gobierno por su actuación. Los éxitos contra ETA tras el fin del alto el fuego han evitado varios atentados. Contrariamente a lo que algunos sospecharon, el Gobierno no bajó la guardia y siguió con sus labores de seguimiento y control de los terroristas, a pesar del proceso de paz en el que se embarcó el presidente. Este reconocimiento fue el que ayer exigió Zapatero a Rajoy en su acto de precampaña en Santander. Efectivamente, el líder del PP tendría que haber felicitado al Gobierno en esta materia, aunque bien es verdad -miseria por miseria- que tampoco Zapatero ha condenado la agresión a María San Gil en una universidad gallega. [..]"
¡Y ya está! Debería cambiar el texto y decir: contrariamente a lo algunos sospechamos y nos encargamos de pregonar... ¡Hábrase visto mayor caradura! Pero, ¿no es cierto que en su mismo periódico y en medios afines no se paró de decir que ETA estaba más fuerte que nunca después de la tregua debido a la inoperancia del gobierno durante la misma y que ETA había salido reforzada? Es indignante. Señor, señor, a Pedro J. y afines deberían excomulgarles por mentirosos sus conmilitones, los obispos. La suerte que tienen, ellos y los obispos, es que saben que no hay infierno y, por tanto la mentira es barata.
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