miércoles, 26 de septiembre de 2007

Un Ayuntamiento de Jauja.

Si bien no se sabe muy bien de donde viene la expresión “esto es Jauja”, sí hay coincidencia en su significado. Un Ayuntamiento de jauja sería aquel en el que todo son facilidades para prosperar, todo es alegría, gasto y fiesta. Digo esto, porque, oídas las últimas noticias sobre dificultades económicas de una gran empresa inmobiliaria y constructora radicada en Xàtiva por todos conocida, me asombra que esto haya podido llegar a suceder y la única explicación que puedo atisbar es que dicha empresa pensó que en todas partes iba a tener el trato amable y voluntarista que encontró en el Ayuntamiento de Xàtiva, perdón he querido decir Jauja, y más concretamente en su alcalde, el hoy presidente de la Diputación, Alfonso Rus. En otras palabras, si el PP de Xàtiva había convertido su Ayuntamiento en un “país de Jauja”, ¿por qué no podía pasar esto en todas partes?
Pongamos varios ejemplos:

Avanza: En qué otro lugar que no sea un Ayuntamiento de Jauja, se iban a recalificar unos terrenos de dominio público para subastarlos al mejor postor que iban a estar al lado de la futura estación del AVE y una vez adquiridos se iba a modificar otra vez el PGOU para que se pudieran construir cuatro alturas. En jauja.
Plaza de Toros: En qué otro lugar que no sea un Ayuntamiento de Jauja se va a decidir otorgar una obra de suplantación completa de un BIC por seis millones de €, sin estudio previo de Patrimonio y sabiendo que va a haber un modificado de, por ahora 4.000.000 de € más. Además, después de haberse acordado que cobraría las certificaciones según llegara el dinero de Conselleria y ante la morosidad de la misma, el Ayuntamiento hace una operación de tesorería para que la empresa pueda cobrar ya siendo de cargo púbico los intereses de la misma. Sólo en Jauja
Aparcamiento Plaça la Bassa: En qué otro lugar que no sea Jauja se va a adjudicar un Aparcamiento con sólo 2 plantas y 80 plazas y después se va a modificar para poder hacer 3 plantas y 120 plazas sin volver a hacer concurso público. Únicamente en Jauja.
Sector Palasiet: En qué otro lujar que no sea Jauja se van a compensar los gastos de urbanización con suelo y derechos de construcción públicos más baratos que el que corresponde a VPO para que puedan construir vivienda libre. Y encima lo justifiquen diciendo que la empresa ha cedido el jardín del Palasiet en el que no se podía tocar ni una palmera porque estaba ya catalogado como dotacional. ¡Viva Jauja!
Olímpic: En qué otro lugar que no sea Jauja, un alcalde en activo es también Presidente de un Club de Fútbol que recibe un fuerte patrocinio de la misma empresa que es adjudicataria de obras que antes refrenda como alcalde. ¡Jauja! ¡Jauja! ¡Jauja!


En resumen, ¿en qué otro lugar que no sea un Ayuntamiento de Jauja se van a poner todos los medios técnicos, privados y públicos, para dar cobertura legal a decisiones de ámbito político que le favorecen siempre?
Debieron pensar que, si esto pasaba en Xàtiva, toda la Comunidad, todos sus Ayuntamientos y toda España podría ser Jauja para ellos. Parece que no ha sido así. Desafortunadamente para unos, afortunadamente para otros. Veremos en qué queda todo.

lunes, 24 de septiembre de 2007

No te jode el profeta

Clarividente artículo publicado en EL PAIS el 11-01-2001, cien días después del Congreso de Alicante en el que elegimos (yo incluido) a J.I.PLA.

PSPV-reciclado
TRIBUNA: FRANCISCO SEVILLANO

'Someter repetidamente una materia a un mismo ciclo, para ampliar o incrementar los efectos de éste'. Así se define reciclar en el Diccionario de la Lengua de la Real Academia Española. Se trata de una primera acepción de esta palabra muy clara, no por su brevedad sino por su sencillez. Algo tan simple que difícilmente puede confundirse con hacer de nuevo una cosa o volverla a su primer estado, pues no es lo mismo reciclar que renovar. Pero también es cierto que lo que perturba a los hombres no es precisamente la realidad sino la opinión que de ella se forman. El lenguaje, a modo de discurso, envuelve la vida cotidiana en una tupida red de significados. La realidad se asemeja a un inmenso escenario donde los individuos teatralizan una tragicomedia.

Así sucede con los discursos políticos, que con harta frecuencia son máscaras que ocultan la falta de coherencia de las palabras con las actitudes y los comportamientos personales. Renovación, progresismo y unidad se confunden así en el PSPV con el reciclado de viejas prácticas personalistas en el modo de hacer política. Ésta es la obra teatral que protagoniza Ignasi Pla y dirige... Son ya cien representaciones, una por día, desde su elección como secretario general en el IX Congreso del Partido Socialista del País Valenciano. Cien días de tarea en la dirección de un partido y la oposición política que merecen un pobre balance: el PSPV apenas ha mejorado su imagen pública y, consiguientemente, no ha ganado en credibilidad electoral, y ya es difícil con las políticas del Partido Popular valenciano.
Un partido político es una organización con ambición de permanencia que agrupa a una serie de personas relativamente cohesionadas en torno a una ideología y con voluntad de llegar al poder público. Un cuadro que no se corresponde con la situación del PSPV en estos momentos, cuando sigue clavado en la intención de voto de los ciudadanos a más de 15 puntos de distancia del PP. Este primer balance debería ser suficiente para desenmascarar un poco creíble discurso de renovación. Con no mucho más tiempo, la irrupción de un personaje como Rodríguez Zapatero ha producido efectos en la política nacional, si bien se trata de una renovación pendiente que no ha conseguido remover determinadas situaciones y prácticas en algunas federaciones socialistas regionales.
Ciertamente es el caso de la valenciana, pues ha interesado más una pacificación aparente y una precaria unidad que la remoción de los problemas enquistados. En este tiempo, se han roto viejas fidelidades de grupo, pero permanecen ancladas formas de hacer política personalistas y clientelares: apenas se han reciclado las personas, pero no se han renovado las prácticas y los proyectos. La politeia que dijera Aristóteles, como representación simbólica de una forma de gobierno en que el poder se ejecuta en beneficio de todos, se sustancia en unas prácticas, en unas conductas cotidianas, que hacen que las alianzas cambien para sobrevivir. Ahora las alianzas las decide y se sirve de ellas cada dirigente local y las estrategias políticas no van más allá de la comarca a la que se pertenece. Quizá haya sido una consecuencia perversa y no deseada de la estructura comarcal adoptada por el PSPV: no importan tanto las ideas y los proyectos como controlar un determinado número de delegados en una comarca para poder negociar una cuota de poder.
Estos dos factores, que afectan a la práctica política y el espacio en que se desenvuelve, pueden explicar lo sucedido en los últimos meses en el socialismo valenciano. En primer lugar, un congreso nacional del PSPV que cerró su crisis en falso. La sumisión a la Comisión Ejecutiva Federal, que a través de su secretario de Organización impuso cuotas y maneras de decidir quiénes habían de formar parte de los distintos órganos de gobierno del PSPV en nombre de la integración, distorsionó cualquier atisbo de renovación en aras de una calma que beneficiara la estabilidad de Rodríguez Zapatero en la dirección del PSOE. El resultado ha sido el reciclado de viejos políticos y la salvación agónica de otros, como es el caso de Joan Lerma, además del ascenso de algún que otro personaje sin trascendencia y al rebufo de la oportunidad que significó la imperiosa necesidad de cada voto por Ignasi Pla para tener la oportunidad de ser elegido secretario general del PSPV.
El segundo episodio, que ha absorbido las energías del nuevo secretario general y de sus acólitos más próximos en la Ejecutiva, ha sido la suerte de cada uno de los congresos comarcales que se han celebrado, pues la manera de cerrar aquel IX Congreso del Partido Socialista del País Valenciano hacía inevitable la confrontación. El objetivo no ha sido más que el control del Comité Nacional del PSPV, un órgano en el que se articuló buena parte de la estrategia de acoso y derribo de Joan Romero. Pero además permitirá atar mejor los apoyos necesarios en unas elecciones primarias a la candidatura a la presidencia a la Generalitat Valenciana, sin olvidar que facilitará la capacidad de decisión en el comité de listas. Renovar un partido es una tarea que comienza por la cultura política de la militancia y la voluntad de sus dirigentes más allá de los discursos y las ambiciones personales, y no hay que olvidar que reciclar no es más que economía de medios.

sábado, 22 de septiembre de 2007

Bueníííííííííííísimo.



Atentos a la última frase

lunes, 17 de septiembre de 2007

L'enquesta del Levante sobre candidats al PSPV

El Levante està mantinguent durant ja molt de temps l'enquesta digital sobre els possibles candidats a la Secretaria del PSPV (Al costat hi ha el resultat provisional a data de 16-9-2007). A més el dos darrers diumenges ha publicat un article rellevant sobre el tema. L'interés del medi i els resultats publicats mereixen alguna xicoteta reflexió.

Massa interés demostra el diari. Un diari que moltes vegades s'identifica amb l'esquerra i el PSPV i que sempre ha tingut voluntat d'influir en nosaltres. Quan manté la publicació de les dades quan ja no és d'interés general ni al PSPV l'interessa és perquè el resultat que dona li agrada. No sabria explicar raonadament quina és la raó.

Tota enquesta digital és, per definició, falsa. No més poden votar els que tenen accés a Internet i, a més, una persona pot votar les vegades que vulga (bé perquè coneix el "truco" per fer-lo en un sol ordinador, es fàcil, o bé perquè té accés a més d'un ordinador). M'imagine quants i cóm hauran votat a Blanqueries. Així que el resultat no és gens indicatiu.

A pesar de que el màxim nombre de vots haurà vingut de gent del partit (la inmensa majoria de la població passa d'aquest tema), de segur que han votat uns quant que són només simpatitzant, gent interessada i, no sabem quants, gent que vota per tal de fotre.

Però, no obstant marca tendències. Una: és evident que la candidatura de Sevilla no ha caigut massa bé. Dos: Hi ha una divisió prou equilibrada entre dos candidats: Alarte y Puig. En el cas de Puig, recolzat per l'aparato, em pareix que ha rebut molt vots del quadres del partit que tenen accés a la votació, precisament per estar treballant per al partit. Tres: Per a ser nou i prou desconegut, Alarte s'ha defés. (Hi ha que recordar que és l'unic que ha dit clarament que vol optar al càrrec, i això és un valor afegit).

En conclusió, no hi ha que fer-li massa cas a l'enquesta. No és indicativa de res clar ni definitiu en quant opinió generalitzada (per més que diguen que han votat 20 o 30.000 persones) i escama tant d'interés per part d'un diari que només tracta d'influir, no d'informar sobre el tema).

lunes, 10 de septiembre de 2007

Tancredi ha vuelto (a propósito del PSPV)

Interesantísimo artículo de Miquel Alberola, hoy en Levante:

[...] La vieja treta de que quien se postula acaba formando parte de la ejecutiva se renueva y, a la vez, revela la trampa en la que se está convirtiendo un proceso que tenía que sacudir al partido de su coma electoral y desarraigarlo de la oposición, que es su ecosistema natural desde 1995. De nuevo, la solución a la crisis que se perfila es la fórmula que ha propiciado la crisis. Un modelo en el que el reparto ciega cualquier posibilidad real de cambio. Porque lo sustancioso es el control de la estructura y no la seducción del voto. Este sistema, en el que la aritmética interna consume más energías que la reflexión hacia fuera, no sólo ha alejado al partido de la realidad sino que ha acabado privándole de la aportación de quienes en otro tiempo le suministraron ideas y papeles de futuro. Pero como para el cínico y voraz Tancredi, el futuro sólo es el pasado envuelto con una casaca garibaldina. ¿Una sola candidatura que aglutine, como se repite con postizo altruismo? Mejor dos y que la alternativa rompa la estructura en pedazos. A no ser que a lo único que aspira el PSPV es a aglutinar masocas electorales. Porque el amplio electorado que en tiempos lejanos le dio mayorías se encuentra cómodo al otro lado del abismo.

sábado, 8 de septiembre de 2007

"Sevilla" hace marcha atrás.

No es por ponerme moños, pero lo que ahora dice Sevilla ya lo dijimos otros nada más finalizado el Comité del 21 de Julio pasado. Efectivamente habíamos "perdido" la oportunidad de un Congreso extraordinario cuando no se acordó en el Comité del 2 de junio.

Las emociones de los electores

Artículo publicado en "Las Provincias" por CANTE HONDO con el que estoy básicamente de acuerdo

La revista Investigación y Marketing recoge en su número 92 un entretenido y didáctico artículo que bajo el título de “Mercadotecnia de las emociones: Su aplicación en la Política Electoral” ofrece una interesante teoría sobre cómo los partidos políticos pueden ver incrementado su apoyo electoral –número de sufragios– mediante un conocimiento profundo de las emociones de los ciudadanos y de las técnicas que faciliten su movilización. Tal y como señala el autor del escrito, Andrés Valdez Zepeda , doctor especialista en Ciencia Política de la Universidad de Guadalajara (México), “el hombre es un ser emocional y su voto electoral es un acto eminentemente emotivo”, y destaca: “La estrategia de algunos partidos políticos modernos está centrada en la movilización de las pasiones y emociones de los electores”. Por último, aspiro a no cansarles, el autor también afirma: “El candidato o partido que triunfa en los comicios no es necesariamente el mejor, es el que es percibido como mejor por la mayoría de los electores que acuden a votar”. Desde la humildad y ajena a cualquier intención de dar consejos, recomiendo la lectura del texto a los políticos valencianos de todo signo y condición. Estoy convencida, por otro lado, de que algunos, intuitivamente, quizás, ya están en el camino marcado por los principios que rigen la denominada “mercadotecnia de las emociones”. Otros, por el contrario, siguen anclados en la caduca idea de que para ganar elecciones basta con plantear soluciones a los problemas y necesidades de los ciudadanos. Las más recientes experiencias electorales indican que no es así. El PP valenciano, pese a la crisis interna derivada de los enfrentamientos entre campsistas y zaplanistas que logró colonizar la anterior legislatura, ha encontrado su camino para conectar con las emociones de una amplía mayoría de los ciudadanos de la Comunitat, y lo ha hecho en un doble sentido: a su favor, por un lado, y en contra del PSOE, en tanto que partido que Gobierna las instituciones del Estado. Todos los mensajes pre electorales y electorales del PP han ido dirigidos a forjar en el “corazón” de los votantes dos ideas-nodriza de las que se nutren todos sus argumentarios. La primera, que “vivimos en una autonomía que ofrece motivos sobrados para sentirse orgullosos de ser valencianos” y ello, segunda idea, “a pesar del Gobierno de Madrid, que ningunea a esta Comunidad, la obvia, la tiene en el olvido y la discrimina respecto a otras autonomías…”. Ambos mensajes están llenos de trampas e inexactitudes y, sin embargo, su efectividad, a la vista de los resultados del pasado mes de mayo, es altamente notable. El PSPV-PSOE y la izquierda valenciana, en su conjunto, se afanan desde hace años por hilar argumentos que contrarresten las argucias dialécticas del PP, en un esfuerzo, volvemos a los resultados, que se constata baldío o, en todo caso, insuficientemente fructífero. Escasos réditos obtendrán los socialistas valencianos de los tiempos y esfuerzos empleados en las luchas intestinas para lanzar el nombre de un nuevo secretario general/candidato a la presidencia de la Generalitat. Mientras no consigan detectar qué provoca en el electorado enojo, ansiedad, miedo, alegría, envidia, tristeza, orgullo, alivio, esperanza… y, una vez detectado, alcancen a dar respuesta a todas esas emociones, y respuesta continuada, lo tienen claro. En las generales de 2004, con un país conmocionado por los trágicos atentados de Atocha, el PSOE y el equipo de Zapatero supieron hacerlo, y hábilmente dieron respuesta al dolor, estupefacción, miedo e ira que se adueñó de un altísimo porcentaje de votantes, sobre todo de aquellos que tenían pensado refugiarse en la abstención y acabaron dando su voto a las siglas socialistas. Cuando el secretario de organización del PSOE, José Blanco , visite por dos veces en los próximos quince días la Comunidad Valenciana, y se reúna con los notables del PSPV-PSOE, debería aprovechar para trasladarles éstas y similares reflexiones. Él, mejor que nadie, sabe que en las próximas elecciones generales su partido se juega mucho en la Comunidad Valenciana. Además de en la circunscripción de Madrid.

miércoles, 5 de septiembre de 2007

La nebulosa sucesión

Publicado hoy, 5-9-07 ak Diari LEVANTE, por MANUEL MUÑOZ

Si lamentable es la situación de Compromís, cuyas desavenencias comentaba ayer en este mismo espacio, la de los socialistas valencianos merecería cuanto menos el calificativo de nebulosa. El secretario general, Ignasi Pla, candidato derrotado en las elecciones y cuyo liderazgo está en razonables vías de extinción, parece ejercer como si acabara de llegar al cargo. El congreso que debería elegir una nueva dirección para iniciar la renovación que debería ser coronada con la victoria electoral en 2001 ha quedado fijado en sus fechas ordinarias, en torno al verano de 2008. El candidato que parecía contar con los parabienes de la dirección federal del partido para hacerse con la bandera (el ex ministro Jordi Sevilla) continúa sin conseguir un incontestable y contundente apoyo de José Luis Rodríguez Zapatero. Finalmente, y sin que a todo esto Sevilla haya oficializado sus aspiraciones, que ya constituyen secreto a voces, proliferan los autopostulados totales o parciales. Por orden de aparición: Jorge Alarte, Joaquim Puig y José Luis Ábalos hasta ahora. Se ha argumentado reiteradamente desde el entorno del actual líder del PSPV que el cambio necesita tiempo y reposo. Entiendo lo del reposo, pero no lo del tiempo. Afortunadamente para sus militantes el PSPV sigue estando muy lejos de la cruenta batalla diaria a que se entregó en la segunda mitad de los noventa. Pero sospecho que si se alarga un poco esta dinámica de fuego lento no tardará en reventar la olla a presión. Y, en cualquier caso, la calma chicha de los socialistas no consigue enmascarar que se trata de un partido desarbolado a la espera de designar la figura que lo encabece. No falta quien dice que lo importante es el debate de las ideas y que el de las caras se resolverá una vez decidido el primero. Sin desdeñar la necesidad de la renovación ideológica en el PSPV, tengo para mí que, al igual que en Compromís, todos los sectores coinciden en las prioridades ideológicas. Las discrepancias están en las personas.

sábado, 1 de septiembre de 2007

Superarzobispo Cañizares, azote de infieles , rojos y separatistas

Esta es la Iglesia que se opone a la asignatura "Educación para la ciudadanía" junto con sus acólitos del PP. ¡Señor, señor, si Pablo VI levantara la cabeza! Capa larga y lujosa, boato, latín en misa y rito preconciliar. ¡Eso es lo que le hace falta a España y a los españoles! Cualquier otra cosa es de débiles morales y de corruptos pecadores. Ahora en serio: a éste obispo y otras personas como él les hace falta mucha educación para la ciudadanía.

Vuelve la moda pre Concilio Vaticano II